Jefe paramilitar colombiano reconoce responsabilidad de atentado contra líder sindical
21 de Diciembre de 2000
No obstante, Borja rechazó las declaraciones de Castaño y señaló que "la intención era masacrarme a mí y a mis escoltas y la prueba son los 57 disparos de bala que nos hicieron".
En el ataque en Bogotá, murieron una vendedora callejera y uno de los tres sicarios, mientras Borja y sus dos escoltas resultaron heridos. Se salvaron gracias al auto blindado en que viajaban.
Castaño, máximo líder de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC), el grupo paramilitar que combate a la guerrilla, explicó que ordenó secuestrar a Borja porque es miembro del Ejército de Liberación Nacional (ELN). Castaño agregó que Borja estuvo en octubre reunido con los miembros del Comando Central del ELN: "Esa actuación de Borja lo hace actor del conflicto y como tal, objetivo militar".
Borja, desde la Clínica de la Policía, respondió que las acusaciones "son falacias de ese asesino", y añadió que militaba en el Partido Comunista Colombiano, cuyo comité ejecutivo integra. Explicó que sus contactos con el ELN están destinados a impulsar negociaciones de paz en las que viene trabajando, junto con otros dirigentes colombianos, desde hace más de un año. Borja comentó a la radio Caracol que él y los miembros de la comisión patrocinadora del proceso de paz con el ELN se han reunido varias veces este año con los dirigentes de la guerrilla y a pesar de las amenazas del jefe paramilitar continuará en sus tareas para buscar la reconciliación entre los colombianos porque "no podemos dejarle el país a los violentos".
Borja exhortó a Pastrana y a los organismos institucionales a detener a Castaño: "Ellos saben cómo es Castaño, dónde está, saben que deben y pueden capturar a Castaño y combatir el paramilitarismo".
Un informe oficial del gobierno entregado esta semana asegura que en el país hay unos 8.000 hombres en los grupos paramilitares, de los cuales 150 han sido muertos y 934 detenidos en los últimos cuatro años. (AP)